Ozono Drinks

"GRANDES VINOS TINTOS DE ARGENTINA VOL. I Y II"

01/07/2019 Martín Ignacio Gil
"GRANDES VINOS TINTOS DE ARGENTINA VOL. I Y II"

Dentro del marco de seguir investigando y aprendiendo del vino a través de las degustaciones, Noelia y Martín de OzonoDrinks organizaron dos catas denominadas "Grandes vinos tintos argentinos Volumen I y II" en la que la idea de los flights era probar y comparar una misma etiqueta pero de añadas distintas para ver como evolucionan o tratar de apreciar si hubo algún cambio en los métodos de producción.


"La idea es a ciegas ver como los vinos cambian con el tiempo, las técnicas de elaboración y los lugares dentro de una misma etiqueta. Hay distintos productores por supuesto", prometió el sommelier Martín Buons ante.



Volumen I



FLIGHT 1:


Martín comentó que: "este primer flight lo hacemos con las etiquetas destapadas a fin de orientar y explicar el concepto de la degustación, a partir del segundo flight comienza a ser a ciegas".


FAMILIA ZUCCARDI EMMA BONARDA 2012 Y 2016

  

CONCLUSIONES:

Buonsante explicó: "El primer Emma 2009 era todo de Santa Rosa, después fueron incorporandole Bonardas de Valle de Uco de uva que casi no les llegaba a madurar, entonces era un vino recontra verde, pero lo usaba para corte para el de Santa Rosa. Después trabajando la viña, y empezando a madurar la Bonarda, comenzaron a poner cada vez más del porcentaje de Valle Uco y menos de Santa Rosa, hasta hoy que es 100% Bonarda de Valle de Uco. Es una etiqueta que va siguiendo la corriente del vino argentino. El 2012 es 63% Santa Rosa, 30% Tupungato y 7% Altamira, en cambio el 2016, ya es 51% Altamira, 49% San Pablo, osea pasamos de mayoría Santa Rosa a que sea todo de Valle de Uco. 
El primero, el 2009 era 100% en barrica, el 2012 era 60% en barrica y el 2016 ya comparte hormigón con algo de barrica vieja, entonces ¿que se fue cambiando? todo, el lugar, tiempo de cosecha, la forma de elaboración, es otro vino, tranquilamente podría ser otra etiqueta, sin embargo es algo que resalto, porque no esconden nada, al contrario, fueron cambiando y mostrando cosas que les fueron gustando más. 
Desde que entró Sebastián Zuccardi como Director Enológico fue ir generando el cambio poco a poco, encontrando lugares, también es la evolución de él como profesional".


FLIGHT 2:


TEHO 2010 Y TEHO 2015 ($1420)


  


CONCLUSIONES:

Uno dijo que estaban bastante parecidos en boca, como que se notaba que era el mismo vino pero de añadas distintas. En cambio, en nariz estaban diferentes. 

Para algunos el primero estaba algo licoroso, con muchas notas a madera y se apagó rápido. 

La mayoría no sabía de que se trataba. Alguno se animo a decir que sentía algo de Cabernet Franc 2013 el primero y del segundo estaba entre las añadas 16 y 17. 

Para otros, el primero era de una cosecha más vieja por sus notas en nariz y boca. Aunque nadie pudo identificar a ninguno de los dos vinos ni sus cosechas.


FLIGHT 3:


TACUIL VIÑAS DE DAVALOS 2011 Y 2016 ($2380)


  


CONCLUSIONES:

Recién servido en copa, uno se animo a decir, "bienvenido el Cabernet Savignon" y pregunto si era de Salta, por los aromas a fruta cocida y aceitunas e inclusive si era un RD de Tacuil. Otro dijo que era un Cabernet Franc de Mendoza. Aunque la mayoría coincidía que era más de Salta.

Al segundo algunos le sentían en nariz notas a extracto de tomate y otros a dulce de tomate. Les gusto más el primero que el segundo a varios, en cambio a otros, al revés. 

Aunque muchos coincidieron que ambos eran algo cansadores en boca, al primero lo notaron un poco mejor, como más "fino". Todos se sorprendieron al destaparlos y ver de que vino se trataba.


FLIGHT 4:


J. ABERTO 2018 Y 2014 ($1200)


  


CONCLUSIONES:

El mismo que identificó del flight anterior en cuanto sirvieron la copa, dijo, "esto es del sur señores" y vaticinó que era un J. Alberto por las notas en nariz del primero. Algunos se sumaron a esa afirmación, mientras que otros dudaban por las notas del segundo.

A la mayoría les gustó más el primero que el segundo. En cuanto a las añadas, alguno dijo que si era un J. Alberto el primero era 2017, pero el segundo no le parecía que era del mismo productor. Otro dijo que el segundo era más nuevo que el primero por la fruta que tenía y que el primero tenía aromas más terciarios.

Pero para la mayoría el primero era de una añada más nueva. Para algunos la nariz los llevaba a la Bodega Noemia pero para otros los hacía recordar los vinos del sur.


FLIGHT 5:


ACHAVAL FERRER FINCA MIRADOR 2007 Y 2013 ($4250)


  


CONCLUSIONES:

Uno afirmó que era un vino de Achaval, por la acidez en boca y las notas a anchoa, y otro agregó de que se trataba de un Quimera más que de un finca. 

Algunos coincidieron en que fue el flight de los vinos más parecidos en boca, aunque no tanto en nariz.

Para muchos el primero tenía bastantes notas a madera, en cambio, para otros, al segundo se le notaba más la barrica.

Al final, la mayoría dijo que era de la bodega Achaval Ferrer. En cuanto a las añadas, alguno afirmó que el primero era 2009 y el segundo 2014. 

Respecto a cuál vino gustó más, varios prefirieron al segundo mientras que a muchos no les gustaron ninguno de los dos vinos.


FLIGHT 6:


SUPERUCO GUALTALLARY 2011 ($4100) Y 2015 ($3900)


  


CONCLUSIONES:

Uno preguntó ¿SuperUco? y varios dudaron pero movieron la cabeza con un tono afirmativo que podría llegar a ser, hasta que todos coincidieron que era un SuperUco. 

Alguno dijo que el primero tenía muchas notas a barrica y por eso afirmó que era la primera añada del vino, osea la 2011. Del segundo otro exclamó que podría ser la añada 2015 por sus notas animales o cuero en nariz. 


VOLUMEN II



"Misma modalidad, doce vinos a ciegas, dos añadas distintas de la misma etiqueta. La idea es ver la evolución de los vinos y si hay cambios en su desarrollo y forma de producción", aclaró Martín Buonsante.




FLIGHT 1:


PASSIONATE WINE MONTESCO PARRAL (MALBEC, CABERNET, BONARDA) 2011 Y 2016 ($850)


  


CONCLUSIONES:

Sobre el primero algunos dijeron que se lo notaba algo caído, alcohólico y con muchas notas a barrica. Para otros estaba muy expresivo y les gustó mucho más que el segundo. A otros pocos fue al revés, les gustó mucho más el segundo.

Por ahí se escucho, ¿es un blend? y algunos asintieron con la cabeza. Otro, preguntó si era el Tito de Zuccardi.

En cuanto al color, el primero no denotaba la evolución y estaba muy entero dijeron algunos.

Uno se animo a idenntificar las añadas y afirmó que eran un 2011 y 2015, en cambio, otro exclamó que el segundo era del 2016.


FLIGHT 2:


VIÑA COBOS BRAMARE MARCHIORI 2009 Y 2015 ($3600)


  


CONCLUSIONES:

Uno remarcó sobre el primero que estaba retraído y con muchas notas a madera. Otros dijeron que tenía notas a puchero o caldo de verduras. 

La mayoría coincidió en que se notaba mucho la diferencia en los colores. Ambos vinos compartían la entrada dulce en boca que a varios no les gustó. Alguno pensó que por la nariz podría ser algún Aluvional de Zuccardi. Otro, que quizás era algo de Cobos, por ejemplo un Bramare. Y al pasar los sorbos, ratificó que era un Bramare.

Del primero también dijeron que tenía algunas notas en boca a vino fortificado como el Malamado u oporto.

Los dos tenían baja acidez, y el primero se caía rápido. Muchos coincidieron que podía ser un vino de postre. En cambio, el segundo fue el que le gustó a la mayoría. En cuanto a las añadas uno dijo que era 2010 y 2015, mientras que otro le refutó que el primero pensaba que era más viejo.


FLIGHT 3:


MENDEL FINCA REMOTA 2016 Y 2010 ($2500)


  


CONCLUSIONES:

En un principio todos coincidieron en que las notas a barrica preponderaban en ambos vinos. Uno preguntó si podían ser de Achaval Ferrer, pero varios respondieron que no tenía la acidez característica en boca.

Otro pensó en voz alta si podía ser algún vino de Pulenta, y generó alguna duda entre los presentes. Aunque uno le refuto, que lo sentía menos dulce que los vinos de Pulenta pero con unas notas de barricas más agresivas.

En cuanto a las añadas, algunos pensaban que el segundo era el más viejo y otros al revés, porque tenían notas muy parecidas en nariz y en boca no evidenciaban la diferencia de cantidad de años.

A varios no le gustaron ninguno de los dos vinos, en cambio a otros un poco si, pero a nadie le pareció lo mejor de la noche.



FLIGHT 4:


TITO ZUCCARDI 2010 Y 2016 ($1100)


  


CONCLUSIONES:

A muchos las notas en nariz del segundo le alegraron la cata, la nariz más linda se escucho.

Alguno deslizó que eran dos vinos muy diferentes. Y uno se animo a decir que le hacia recordar al vino de Alto Las Hormigas de Apelación Gualtallary que lo había tomado unos días atrás.

Otro afirmó que era algún Aluvional y que le gustaba menos el primero que el segundo a raíz de su nariz más evolucionada.

Todos coincidieron en que el segundo era más joven y sintieron una nariz más fresca con notas a fruta roja fresca. 

Uno exclamó que era como si los dos vinos fueran de distintos cortes y otro afirmó esa idea diciendo además que se notaba mucho la diferencia de vinificación en las distintas añadas. Por eso la mayoría estuvo de acuerdo en que eran dos vinos de Sebastián Zuccardi, por la evolución en su enología.

En cuanto a las zona, muchos manifestaron que por las notas a tiza y su textura podían ser de Gualtallary. Y definitivamente fueron los vinos con más textura en boca de toda la degustación.

Y respecto a las añadas uno afirmó contundente que era un vino de Zuccardi de las añadas 14 y 17, y uno le respondió que también pensaba que era de Zuccardi, un Aluvional de Altamira pero de otras añadas, 2011 y 2014. A lo que otro comentó, que si era de Zuccardi no le parecía un Aluvional, sino un Tito.


FLIGHT 5:


NOEMIA 2016 Y 2010 ($4500)


  


CONCLUSIONES:

Uno arrancó con un ¡Muy bueno los dos vinos!. Otro, con ¡Que buena acidez! que tenían. Manifestaciones que prometían un gran flight.

Del primero, que tenía algunas notas a yogurt por la fermentación maloláctica y que era más viejo que el segundo por alguna nota a evolución. Otros plantearon que el segundo parecía más viejo por las notas a barrica y su color más evolucionado. 

Algunos encontraron en el segundo como una nota sucia, a establo que no les gusto mucho. 

Respecto a las etiquetas, unos pocos dijeron que podían ser el Noemia por esa nota a establo que algunas añadas tuvieron. Otros tantos plantearon que podrían ser SuperUco  2011 y 2015.

Uno afirmó que el primero era más nuevo porque tenía menos notas a madera respecto al segundo.

Igualmente la mayoría coincidió que las dos añadas eran grandes vinos.


FLIGHT 6:


CHACRA 2017 Y 2009 ($3500)


  


CONCLUSIONES:

Del primero dijeron que tenía una nota a frutilla fresca. Hasta uno se animó a decir que podían ser Chacra. Otro se sumó y agregó rotundamente que era un Chacra 55 de la añada 2017 y 2010.

Varios plantearon que el segundo era más viejo por lo notorio de sus notas a madera y su color más evolucionado, con alguna nota a acetona. Otros, que el primero tenía notas a extracto de tomate y algo floral, y que fue el mejor vino de la noche.

Para varios también el segundo estaba muy bien para tomar hoy, aunque el primero con más años en botella iba a ser superior. 
















 









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